lunes, 3 de agosto de 2015

Una tarde de verano.



Una tarde de verano,
en  día de cumpleaños;
el tiempo pasa muy rápido.
Un paseo por el campo.
Molinos de viento en lo alto,
chorreras de agua en lo bajo.


Una bici en el camino
me enseñó que mi destino
era rodar y rodar...



Atardecer de verano,
en día de cumpleaños;
el tiempo pasa muy rápido.
El sol oculta sus rayos.
El chico mira y alucina
al ver al rey tras la colina.

4 comentarios:

  1. ¡Felicidades, amigo!
    Hasta el rey lo celebra, no te quejarás; ni de su regalo: no hay dinero que lo pague.
    Yo brindaré por vos y por tu arte con vino de tu tierra esta noche. Seguro que tiene alguna esencia de atardeceres similares.
    Un fuerte abrazo.

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    1. Gracias.
      Hay regalos que no tienen precio.
      Yo también haré un brindis por ti y por los que pasen por aquí.

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    2. Muchas felicidades primo otro brindis por aquí

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